Los bebés nacidos bajo el signo de Cáncer necesitan tener siempre la mamá o el papá cerca de ellos. Son cariñosos y extremadamente sensibles. Son hogareños, tímidos, y poseen una memoria privilegiada.
¡Felicidades mamá porque tu bebé canceriano es todo amor! Altamente intuitivo e imaginativo, con muchas percepciones, sueños clarividentes, protector de la familia, comprensivo, confiable y muy pegajoso, esta criaturita especial exige mucha atención de tu parte porque se da cuenta de todo lo que te sucede aunque no hables. ¡Nunca es poca la cantidad de abrazos y besos que se le prodigan! Siendo el signo más maternal de todos su tendencia es a querer abandonar el nido muy tarde en la vida, o a no dejarlo nunca. Sus cualidades empáticas -o sea, capaz de ponerse en el lugar de otras personas- le serán de gran ayuda en su futuro.
Estimula su imaginación y cultiva sus talentos premiándole siempre con un gesto de amor. Muchos cancerianos son excelentes maestros y psicólogos, consejeros, médicos, chefs de cocina, administradores financieros y escritores apasionados.
Y ¿qué sucede con sus aspectos negativos? Debido a que su regente es la Luna que siempre está cambiando, tu bebé canceriano suele ser temperamental y cambiar de modo y carácter en un día y ser extremadamente sensible. Ayúdale con tu estabilidad emocional a que vea la vida con más realismo y sin perder en ningún momento su toque amoroso y compasivo pueda enfrentar resueltamente las dificultades.
Aspectos positivos: Útil, sensible, doméstico, maternal, intuitivo, emotivo, tradicional, buena memoria.
Aspectos negativos: Quisquilloso, se siente herido con facilidad, negativo, manipulador, perezoso, egoísta, autocompasivo.
Lema clave: Yo Siento, y la región del cuerpo que rige su signo son el pecho y el área del estómago donde enseguida van a parar todos los disgustos.