Los niños y sus mascotas desarrollan un vínculo muy especial que iran forjando su vida ya que los ayudan a ser más responsables, aprenden a respetar a la naturaleza y crecen desarrollando un carácter más abierto y sociable, lo que les servirá en sus vidas para mejorar sus relaciones humanas.
Si un niño comparte su vida con un animal, crecerá más feliz y será más sociable potenciando su autoestima. Los niños obtienen de su mascota bienestar físico, puesto que está comprobado que acariciar a un animal hace que nuestro cuerpo segregue endorfinas, reduciendo así, el estrés y la ansiedad.
También la responsabilidad que se genera al cuidar una mascota, les enseña a ser más compasivos y entender mejor el sufrimiento o los problemas de los demás. Podrán afrontar y entender naturalmente, los procesos vitales del ser humano como el nacimiento, crecimiento, reproducción y muerte.
A la hora de elegir la mascota para su hijo, le aconsejamos tener en cuenta algunas cosa, como su tamaño, donde vivirá, el carácter de acuerdo a la raza, de donde proviene, si está sano, etc., pero lo mejor es no catalogar a una raza de perro o de gato como recomendada para niños, puesto que cada perro es un mundo y su educación estará condicionada por factores externos más que por genéticos. Lo más importante es la elección del cachorro, el amor, la educación y estimulación que le proporcionemos.,
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